Observatorio de Investigación

Desarrollamos investigaciones sobre la producción y el empleo local

El Observatorio de empleo y producción, el cual viene realizando y proyecta estudios sobre la relación educación - trabajo, concentrándose en: demanda laboral insatisfecha y empleo futuros (realizado en 2023 en etapa de procesamiento de datos y presentación de resultados); perfiles y trayectorias laborales de las y los cuidadores domiciliarios, (realizado y presentado en 2022 en conjunto con la UTG PAMI); seguimiento de trayectorias laborales de las y los egresados de la Escuela de Educación Profesional (en proceso 2023); y análisis de los perfiles y las trayectorias laborales de las y los trabajadores del software en el conurbano sur (proyectado 2023) .

Las transformaciones económicas, políticas y culturales generadas en el marco del proceso de crisis de los últimos cinco años, han condicionado en forma negativa y fuertemente, los desarrollos regionales y locales, a esto le debemos agregar las consecuencias sociales y económicas que está dejando la pandemia, cuyo impacto se está haciendo notar con fuerza en las comunidades en situación de vulnerabilidad.

Como manifestación de estos procesos, se observan crecientes niveles de desempleo, subempleo y trabajo precario, y consecuentemente el deterioro de la calidad de vida de las mayorías sociales.

En este contexto de creciente vulnerabilidad social, resulta imperioso desarrollar acciones formativas que den cuenta de la necesidad de promover cambios desde la perspectiva del desarrollo de los municipios. La formación de los jóvenes trabajadores/as (con o sin trabajo) se constituye en un elemento clave para la generación y sostenimiento de propuestas que puedan prosperar a mediano y largo plazo. Se puede afirmar que personas cualificadas permiten el desarrollo, su ausencia lo inhibe.

La formación y la educación técnico profesional de calidad es, en consecuencia, un elemento fundamental de las estrategias de desarrollo de las economías municipales. De allí que resulte necesario rever y diseñar estrategias de formación con la finalidad de favorecer procesos a partir de las características y particularidades territoriales.

Hoy, la sociedad del conocimiento resalta nuevas formas de producción, donde justamente el conocimiento y la gestión del talento humano se constituyen en los principales factores explicativos del desarrollo económico. La heterogénea y compleja estructura social, producto de las permanentes transformaciones en el mercado laboral, requieren de trabajadores/as profesionales y organizaciones sindicales y empresariales capacitados para construir respuestas innovadoras.

Así, el paradigma “formación (inicial) - empleo (ingreso al mercado de trabajo) – formación (actualización) – trabajo (adecuación a nuevas formas de gestión) – formación (reconversión)…” puede pasar de ser principio a desafío y objetivo para las instituciones de formación, y lo más importante, para el conjunto de actores políticos, económicos y sociales que actúan en el territorio.

La formación de los/as trabajadores/as (ocupados o no), es uno de los ejes del desarrollo económico local.

Una formación técnico profesional a nivel local, debe estar caracterizada por:

  • Estar situada en el contexto de la realidad de nuestros territorios, teniendo en cuenta un entorno caracterizado por la crisis y la escasez de empleo de calidad.
  • Estar al servicio de la estrategia política de desarrollo territorial.
  • Estar orientada por la demanda y las potencialidades de crecimiento de cada localidad y región.
  • Tener un carácter flexible tanto en su concepción como en su implementación para promover la capacidad de adaptación a un entorno y una realidad cambiantes y el acceso de las personas al aprendizaje continuo.

La cuarta revolución industrial se caracteriza por generar una transformación digital, donde de la mano de internet, todos los actores sociales (consumidores, empresas, gobiernos, organizaciones de la sociedad civil) pueden conectarse a través de distintos dispositivos y plataformas digitales e interactuar. Pero la conectividad que posibilita internet no sólo alcanza a los sujetos; lo realmente novedoso de este proceso ha sido que los objetos también puedan conectarse a la red, y esto ha generado un cambio sustancial en la forma en que se produce (internet de las cosas). La irrupción de estas nuevas tecnologías presenta grandes desafíos para las economías en desarrollo, como

la de nuestra región. La apropiación de tecnologías es muy dispar, donde conviven industrias con bajo nivel de incorporación de tecnologías y baja productividad, algunas industrias en transición y otras que incorporan o generan innovaciones. Este escenario nos motiva a trabajar de manera articulada con diferentes actores para contribuir al proceso de transformación digital. Las instituciones no pueden permanecer ajenas a estos cambios, y se requieren esfuerzos de parte de todos los niveles de gobierno, las organizaciones industriales y gremiales, y de las instituciones del sistema científico y tecnológico para acompañar a las empresas, emprendedores y cooperativas a afrontar la automatización y la digitalización. La UNQ cuanta con una trayectoria educativa destacada tanto en la enseñanza de la informática, a través de la Licenciatura en informática, como por la Tecnicatura Universitaria en Programación Informática, como en la aplicación de la informática a la producción, el control numérico de procesos, y las tecnologías digitales de visión e inteligencia artificial a partir de la Ingeniería en Automatización y Control que se dicta en nuestra Universidad. En este entramado de necesidades, saberes y experiencias pensamos desarrollar el diploma de extensión en servicios informáticos, en el marco de una red de actores y saberes.

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